Estos envases están diseñados para garantizar la seguridad alimentaria y mantener la integridad de los alimentos, protegiéndolos de la humedad, la luz y otros factores ambientales que podrían afectar su calidad. Además, los envases para alimentos de mascotas suelen incluir características específicas, como cierres herméticos y materiales resistentes, que los hacen adecuados para el almacenamiento y la distribución de productos destinados al consumo animal, asegurando así la salud y el bienestar de las mascotas.